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Entrena tu cerebro para pensar y aprender VESL en Houston

Entrena tu cerebro para pensar y aprender VESL en Houston

A muchas personas les cuesta aprender un nuevo idioma y algunas nunca lo hacen, la principal razón es que no trabajan en su forma de pensar. Debes saber que es posible entrenar tu cerebro para hablar en inglés y comprender VESL en Houston.

En caso de que vivas en un país de habla inglesa, será más fácil practicarlo. De lo contrario, el entrenamiento mental hará que puedas hacer del idioma un ‘discurso interno’ donde dejes de traducir. Aquí te enseñamos cómo hacerlo.

VESL en Houston – Reprograma tus pensamientos para aprender inglés

Para que una persona hable fluidamente, necesita procesar rápido las ideas. Para eso conviene pensar inglés. Aunque parezca un reto al principio, tienes que saber que sí es posible.

Eso sí, requiere de esfuerzo, práctica y constancia. Es normal que cuando estamos aprendiendo un idioma, hablemos de forma lenta, ya que pasa debido al tiempo que dedica nuestra mente a traducir desde nuestra lengua nativa.

Esta traducción interna, no solo hace que nuestro discurso sea pausado y torpe, también que suene poco natural, debido a que cada idioma tiene su propia estructura para formar oraciones.

Para que tengas un discurso más parecido al de los hablantes nativos del inglés, te compartimos algunos consejos y ejercicios mentales que te ayudarán a dejar  de pensar en español y lo hagas en inglés como si fuera tu primera lengua.

VESL en Houston – Consejos para pensar en inglés como un nativo

El entrenamiento mental para pensar en inglés tiene varias estrategias. Podrás usarlas de forma individual o practicar una sola que te funcione. Entre ellas están:

Piensa en una palabra a la vez

Para comenzar a transformar tu pensamiento desde el español al inglés, tendrás que comenzar con pasos pequeños. De acuerdo con los expertos, es necesario empezar poco a poco. Para ello, enfócate en tu entorno, piensa en todo lo que ves, y nómbralo.

Si estás dentro de tu habitación, por ejemplo, nombra tu cama, tu armario, la puerta, y cada objeto dentro de ella en inglés. Haz lo mismo en cualquier lugar en que estés, hasta que se vuelva un hábito.

Cuando menos te lo esperes, notarás que tu cerebro piensa en cada cosa individualmente en inglés. Esta estrategia hará que aprendas principalmente sustantivos, pero con el paso del tiempo tendrás que agregar verbos. Es lo que sugieren los expertos.

Una forma de comenzar es poniéndole etiquetas a los objetos en tu casa, y practicar en las mañanas al despertar y antes de irte a dormir en las noches, para memorizar mejor.

Describir palabras que no has memorizado

Memorizar forma parte del aprendizaje del inglés, pero es normal que a veces nos cueste, y que olvidemos algunas palabras estudiadas con anticipación. Cada vez que te pase esto, intenta describirlas.

Por ejemplo, si no recuerdas la palabra “nevera” que en inglés es fridge, intenta pensar en “el objeto donde guardamos la comida” o “de donde obtengo agua fría”. Cualquier información que te ayude a identificarlo.

Si no puedes crear frases tan largas o descriptivas aún, intenta usar oraciones cortas que incluyan sinónimos o antónimos, como “se parece a…” o “es diferente a…”

Si pones en práctica este consejo, desarrollarás la habilidad de entender tu entorno y pensar en inglés como cualquier nativo. Valdrá la pena dedicarle tiempo cada día.

Describe lo que hiciste durante el día

Una vez que llegues a casa y estés descansando luego de un día ocupado, intenta recordar todas tus actividades realizadas desde que te levantaste en la mañana y nárralas. Sí, como si contaras cuentos, o como si algún amigo te estuviera preguntando.

Esfuérzate por ser detallista, sin profundizar en los diálogos. Podrás imitar a los narradores de documentales, pero enfocado en tu vida diaria. Por ejemplo: “esta mañana desperté, abrí los ojos, salí de la cama y me puse mis pantuflas”.

Cada detalle servirá para que tu cerebro identifique las acciones en inglés, tal como lo registra en español, que es tu idioma nativo. Toma en cuenta cada movimiento, como el momento en el que bostezaste antes de abrir la puerta de tu habitación para salir, por ejemplo.

Puedes practicar dos veces al día, o cada vez que estés desocupado. Describe todo, lo que pensaste, los que viste, escuchaste, oliste, entre otros. Y usa oraciones completas, comunes, sencillas y correctas para que tu cerebro las recuerde.

Toma apuntes de las palabras que no conoces en inglés

Debido a que estás aprendiendo un nuevo idioma, siempre te encontrarás con palabras que no podrás traducir en tu cabeza ni pensar de forma ágil. Así que anótalas en un cuaderno o en tu teléfono cuando te pase.

Tomar nota de las palabras que no conoces durante cada ejercicio de pensar en inglés, te permitirá buscarlas más adelante e incluirlas en tu vocabulario.

Si tienes un nivel alto, no las busques en un diccionario de español – inglés, sino en uno de inglés completamente. Así conocerás su definición en el idioma.

Se recomienda aprender entre cinco a diez palabras nuevas por día. Por lo que tomar apuntes te será de mucha utilidad, cuando no sepas el nombre de un objeto que ves.

Practica a diario y estudia inglés en VESL en Houston

Estudiar todos los días es la clave para que el entrenamiento mental para pensar en inglés sea eficiente. Además, refuérzalo estudiando VESL en Houston para que conviertas el idioma en tu segunda lengua y te comuniques como un nativo.

 

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